Mi historia es ésta: fui Testigo de Jehová durante 25 años y mi esposo lo fue durante 35 años. Mi hijo menor se bautizó a la edad de 13 años, y mi otro hijo lo hizo a la edad de 23 años. Todo fue muy bien hasta que mi hijo mayor se casó y él y su esposa Testigos de Jehová se separaron por diferencias de caracteres. Con este evento empezó nuestro drama, pues descubrimos cómo eran en realidad los Testigos de Jehová.
Mi hijo perdió su trabajo y enfermó gravemente y en ese estado permanecía solo en su casa. Cuando vimos esta situación, mi esposo y yo le dijimos que regresara a casa para cuidarlo. Él arrendó su casa y se fue con nosotros, a Quintero, Chile, de donde yo soy. A los Ancianos de la congregación no les gustó la mudanza de nuestro hijo a mi casa, y entonces comenzaron las presiones y los comentarios de los ancianos, hasta el punto de decirle a mi esposo que si echaba a su hijo de su casa él podría llegar a ser siervo ministerial (un claro chantaje), pero mi esposo les dijo que era más importante la familia que los puestos, así que los mandó a la punta del cerro.
Sólo a mi hijo mayor lo expulsaron a pesar de que su mujer y él habían sido infieles, y esta parcialidad fue porque uno de los ancianos tenía tratos comerciales con el padre de la muchacha. Pero aquí no finalizó todo, pues para colmo siguieron con mi hijo menor. Ellos instaron a los padres de los hijos que se juntaban con mi hijo menor para que ellos no lo tomaran en cuenta en el colegio, en el salón, en las reuniones, en las reuniones sociales, o donde fuera. Es decir, un ostracismo salvaje. Esto le trajo consecuencias negativas al menor, ya que se sintió solo, desorientado, y desilusionado, y cayó en una depresión que lo tuvimos que tratar con un sicólogo y siquiatra. Esto destruyó la fe, la confianza y el amor de mi hijo menor. Mi esposo por esto habló y gritó por todos lados, mandó cartas y quejas a Betel de Chile, y nada. Quejas y más quejas con nombre y apellido, con argumentos, con papeles, con personas con puestos dentro de los Testigos de Jehová, y NADA. Simplemente se taparon unos a otros y lo peor estaba por venir. Mi suegra en ese tiempo también era TJ de 81 años, y padecía de Parkinson, y estuvo enferma y postrada en cama por dos años. Durante esos años NADIE de los supuestos ANCIANOS la fue a visitar. Yo me pregunto: ¿Es eso amor cristiano? Ella, después de haber servido fielmente a la Sociedad y nunca haber estado en el comité judicial disciplinario durante los 40 años de TJ, murió sola, abandonada, botada, y olvidada. Pregunto: ¿es eso amor cristiano? No…simplemente son mentiras, utopías, y sueños de opio. Lo triste de todo es que la familia que no era Testigo de Jehová vio este desamor, y con decirles que ni siquiera hubo alguna oración en el funeral por ella, y máxime, cuando mi suegro de 83 años es también un TJ. Por esto, la familia de mi esposo se dividió. Mi suegro repartió los bienes entre sus hijos no cristianos y a los hijos TJ los dejo sin nada, y mi esposo, buen hijo durante toda su vida, y buen hermano, lo único que recibió fue el maltrato de su familia y su desprecio por ser TJ, y a todo esto a mi esposo con la depresión que le dio, se enfermó. Nos fuimos a Santiago tratando de olvidarlo todo y empezar de cero, pero yo me enfermé de pena y nos tuvimos que regresar a Quintero. Aquí a mi esposo le vino una depresión severa, pues su padre murió también lejos de los TJ, y no queriendo saber nada de ellos. Para mala leche mi esposo se enojó con toda la familia en el año del 2008, y a raíz de esto se enfermó de depresión por todas estas penas, tristezas y traiciones de los TJ. En Mayo de ese año resolvimos como familia enviar nuestras cartas de RENUNCIA a los TJ. La enfermedad de mi esposo entró en una fase de desarrollo, y le dio LUPUS. Después de innumerables exámenes dimos al fin con esta rara enfermedad. En abril de este año 2009, entró en el hospital por 10 días donde se le administró quimioterapia. De allí salió bien, pero después volvió a caer, aún con depresión, en el hospital. Estuvo 40 días y salió en dos semanas. En este momento mi esposo está en la UCI desde hace 28 días con un coma inducido, y con un pronóstico de insuficiencia respiratoria catastrófica. El lupus llegó a sus riñones y a su pulmón, y no sé si se salvará de esto, pero quiero dejar en claro algunas cosas.
1.- No somos TJ, gracias a Dios, y aunque esto tenga una resolución terrible de vida o muerte, lo cierto es que todo esto empezó por LA TRAICION, FALTA DE AMOR, E INDOLENCIA DE PARTE DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ.
2.- Esto que acabo de contarles es lo mismo que se presentó como argumento para las renuncias: falta de amor, traición e indolencia.
3.- Sobre mis hijos sólo puedo decir que ellos destruyeron a mi familia, y mi hijo lo único que quiere es no verlos nunca más y tiene un odio profundo en su corazón hacia esta gente.
4. Me quedé callada 3 años esperando justicia y que en algún momento se viera la razón, la justicia, o la humanidad, pero nada. Ahora gritaré a los cuatro vientos, y iniciaré una campaña a nivel local, y si es posible, mundial, para que se desenmascare a esta organización traidora, mala leche, INDOLENTE, que habla del amor al prójimo, de justicia y paz, y sólo son un montón de personas que permiten que les laven el cerebro y que no pueden pensar por sí mismas, pues necesitan que la organización les diga qué hacer y se meten en las vidas privadas para que las familias (según ellos) puedan llevar “una relación sana y acepta a Dios”. Ellos destruyeron mi familia, mi vida, mis hijos, y yo ahora ya no me quedaré callada nunca más. La vida de mi esposo pende de un hilo, y hago responsables de su vida a los Testigos de Jehová. Esta es una secta peligrosa, que si bien existen personas de buen corazón dentro de ella, les tengo lástima, porque NUNCA podrán saber acerca de la AMISTAD SINCERA, SIN EGOISMOS, Y ABIERTA. Y LO PEOR DE TODO ES QUE ANDAN POR EL MUNDO PROCLAMANDO EL AMOR DE DIOS, EL AMOR AL PROJIMO, Y HABLANDO DEL TÉRMINO DE ESTE SISTEMA DE COSAS, MIENTRAS QUE ELLOS MISMOS SE TRICIONAN UNOS A OTROS Y HACEN CAER A GENTE NOBLE Y SINCERA QUE CREE EN SUS TEORIAS RETORCIDAS Y EGOISTAS. EN VERDAD ESA RELIGIÓN NO SIRVE, NO ES LA ADORACIÓN VERDADERA. NOSOTROS NOS RETIRAMOS POR ESO, POR QUE NO LO SON.